La Navidad de Burgos contará con su tradicional Obispillo, aunque el acto estará muy condicionado por la pandemia de la covid-19. De entrada, no habrá ni paseo a caballo por el centro de la ciudad ni recepción en el Ayuntamiento de Burgos, con su carta de peticiones al alcalde ni la bendición desde el balcón de la Casa Consistorial.
De este modo, habrá Obispillo pero no será al uso. Para empezar, se ha suprimido la habitual proclamación del Obispillo en la Sala de Polisón del Teatro Principal, que tendría que haberse celebrado este domingo, 13 de diciembre, tras la actuación en la Seo burgalesa. Lo niños de la Escolanía de Pueri Cantores eligieron entre los tres compañeros que han hecho la Primera Comunión este año, al que será su Obispillo 2020.
Y el próximo domingo se comunicará la elección a padres y compañeros a través del grupo de mensajería que comparten y, a continuación, se hará público el nombre del afortunado. Luego, propio 28 de diciembre, Día de los Santos Inocentes, en la iglesia del Convento de las Madres Salesas, el escolano será investido como Obispillo, en un acto en el que también se dará la bienvenida a cuatro nuevos miembros de la Escolanía, que suma 13 niños cantores.