Confinamiento es la palabra del año 2020. Es la elegida por la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE) entre las diez candidatas en un año aciago que jamás olvidaremos y que ha cambiado nuestra manera de vivir, de sentir y de hablar.
Confinamiento se impuso a otras voces relacionadas con el coronavirus y sus efectos, como las esperanzadoras vacuna, resiliencia o sanitarios, la propia voz pandemia, covid-19, o vocablos más inquietantes, como conspiranoia, infodemia o estatuafobia.
Definida por la Real Academia Española (RAE) como «aislamiento temporal y generalmente impuesto de una población, una persona o un grupo por razones de salud o de seguridad», el término ha marcado buena parte de los meses del año que ahora acaba.