Otros años, hacia las 21:00, los pasos de Jesús con la Cruz a Cuestas y Nuestra Señora de los Dolores se encontraban en la plaza del Rey San Fernando en una de las procesiones más populares de la Semana Santa burgalesa.
Sus imágenes salían a las 19:45 horas de sus respectivas parroquias, San Cosme y San Damián y San Gil Abad, y eran portadas a hombros por costaleros. La imagen de Jesús con la Cruz a Cuestas desfilaba por la calle San Cosme, plaza Vega, plaza y Arco de Santa María. La imagen de Nuestra Señora de los Dolores hacía lo propio por las calles San Gil, Avellanos, Laín Calvo y Virgen de la Paloma.
Ya a los pies de la catedral, tenía lugar una breve liturgia de la Palabra e interpretación de varias piezas musicales. Finalizado el acto, se procedía a la despedida de Cristo a su Madre. Entonces, la imagen de Jesús con la Cruz a Cuestas y su cofradía se dirigían a la catedral por Nuño Rasura y Santa Águeda para realizar una estación penitencial frente al Santísimo Sacramento reservado en la Escalera Dorada, tal como hicieran el año pasado. La imagen de Nuestra Señora de los Dolores volvía a su parroquia siguiendo el mismo itinerario que la ida; mientras que Jesús con la Cruz a Cuestas volvía a San Cosme y San Damián por el puente de Santa María y la plaza de Vega.