Geoda de Pulpí |
La localidad de Pilar de Jaravia, en el término municipal de Pulpí, se convirtió a finales del siglo XIX en uno de los distritos mineros más importantes de España gracias a Mina Rica. A partir de 1936 y tras la Guerra Civil, la mina cayó en desuso y no será hasta 1999 cuando miembros del Grupo Mineralogista de Madrid descubren, en la Mina Rica, la Geoda de Pulpí, una cavidad rocosa de unos ocho metros de longitud por dos de altura, tapizada con cristales de yeso alguno de los cuales llegan a medir casi dos metros.
El origen de esta impresionante geoda puede explicarse en dos fases, referidas básicamente a la formación del hueco y al depósito mineral en el interior de éste. El hueco en la roca se produjo por karstificación de las dolomías que forman la Sierra del Aguilón, acompañada de inyecciones hidrotermales volcánicas. El depósito mineral en la geoda podría explicarse mediante un modelo mixto kárstico-hidrotermal.
Además de la Geoda Gigante se pueden encontrar en la mina numerosas geodas de diverso tamaño siendo la Geoda Partida y la Geoda de Colas de Golondrina las más espectaculares descubiertas hasta la fecha.
Aunque hay otras grandes geodas en el mundo, la de Pulpí es la única de estas características que está abierta al público desde agosto de 2019. La Geoda de Pulpí mantiene las medidas de seguridad establecidas desde el inicio de la pandemia para la prevención del covid-19, que incluyen la toma de temperatura una vez que se accede al recinto, el uso obligatorio de mascarilla, la disposición de gel hidroalcohólico en puntos clave y la desinfección periódica de las instalaciones, donde también se celebran taller mineralógicos complementarios y rutas senderistas.