Conocido popularmente como el "Stonehenge español”, la injusta comparación no es más que una muestra del estado de abandono de este conjunto extremeño histórico.
Durante los meses de verano, coincidiendo con las altas temperaturas y la ausencia de lluvias en Extremadura, un tesoro histórico resurge del maltrato al que ha sido sometido desde hace décadas. Se le conoce popularmente como “El Stonehenge español”, pero el Dolmen de Guadalperal tiene nada que ver con el famoso monumento histórico situado en el condado de Wiltshire, en Reino Unido. De hecho, esta injusta comparación no es más que una muestra del estado de abandono del conjunto extremeño. En medio del recorrido que traza el caudal del río Tajo en la provincia de Cáceres, este conjunto histórico permanece en silencio bajo miles de litros de agua, pero de vez en cuando asoma para recordarnos que sigue ahí.