El 15 de abril de 2019, la catedral de la Notre Dame sufría el peor incendio de su historia. Considerada el principal símbolo del catolicismo en Francia, del skyline parisino y uno de los monumentos más visitados del mundo, mucho se habló, en un primer momento, de si había sido provocado o accidental. Esta impresionante película sugiere algunas causas pero no aporta pruebas.
Ha sido el veterano director Jean-Jacques Annaud ("Enemigo a las puertas", "El nombre de la rosa") el encargado de ofrecer una recreación, paso a paso, de lo acontecido ese día y, en contra de lo que pudiera parecer, ha logrado una película emocionante narrando cómo una serie de hombres y mujeres valientes arriesgaron sus vidas para lograr salvar la catedral. Y eso que la cinta recuerda una serie de errores, contratiempos y obstáculos que retrasaron, por ejemplo, la llegada de los bomberos de forma rápida. Se agradece que la película irradie respeto por los cuatro costados, de ahí que, aunque se hayan cambiado algunos detalles del rescate de reliquias tan importantes con la corona de espinas de Jesús, no haya olvidado capítulos muy entendibles por cualquier creyente, como la escena en la que el sacerdote Jean-Marc Fournier, capellán del Cuerpo de Bomberos de París, arriesgó su vida para salvar las Hostias consagradas.
Un reparto coral, con actores poco conocidos para el público español, hacen verosímil está película perfectamente rodada y donde se vislumbra una gran planificación documental para hacerla tan emocionante, y con los tiempos tan bien medidos para que en ningún momento resulte aburrida.
Annaud convierte en héroes de este film a los seis primeros bomberos que llegaron a la catedral, cuatro de ellos, dos mujeres y dos hombres eran novatos y nunca habían asistido en un incendio, pero no dudaron en jugarse su vida hasta límites insospechados, ellos, como le dijeron al cineasta, lo tuvieron claro " sus vidas valían poco comparadas con las piedras milenarias empleadas para levantar uno de los santuarios más emblemáticos del mundo".
"Arde Notre Dame incluye", lógicamente, imágenes reales de lo que sucedió ese día, pero lo que vemos quemarse casi todo el tiempo fueron los espectaculares decorados creados para tal fin, que recrean esas bóvedas, escaleras de caracol, cornisas o galerías que tardarán años en restaurarse.