Para realizar esta ruta deberemos partir desde la amplia Plaza Ducal de Lerma y bajaremos por la calle Mayor. Tras cruzar el arco de la cárcel y la antigua Nacional I, tomaremos la carretera que se dirige hacia Ruyales de Agua. Una vez hecho el primer giro a la derecha, divisamos al fondo un camino conocido como “Camino del Soto”.
Continuaremos por este y rodearemos la antigua huerta del Convento de los Franciscanos, protegida por una tapia en ruinas. En nuestro itinerario nos encontramos diferentes espacios como tierras de cultivos de cereal, huertas, invernaderos y una gran chopera que deberemos de atravesar para llegar a las vías del tren. Pasando por debajo del puente se llega hasta nuestro destino, Ruyales del Agua.
En este pequeño y tranquilo pueblecito merece la pena visitar su interesante iglesia, que destaca por la decoración de sus canes de motivos animales y humanos.
Antes de partir, es posible reposar o merendar en una zona tranquila de descanso emplazada junto a un lavadero y una fuente. Para el regreso a Lerma tomaremos el camino de ida hasta llegar al nuevo puente de la vía. Allí giramos a la izquierda y campo a través llegaremos a la orilla del río. Remontaremos su curso.
Después de pasar junto a la depuradora y bajo la autovía, seguiremos por la orilla del Arlanza hasta volver a encontrar el camino inicial.
Distancia: 10 kms. Tiempo estimado: 2 h 30 min. Punto de Salida: Lerma. Dificultad: Baja
Ciclabilidad: Sí