La literatura impresa española tiene su origen en Valencia, la ciudad a orillas del Mediterráneo tiene el placer de convertirse en todo un símbolo de estos primeros libros. Durante la Edad Media la edición de libros era especialmente complicado, por eso hay pocas obras que hayan llegado a nuestros tiempos desde esos días.
Pero por suerte, tenemos el privilegio de tener muy cerca de una ciudad que fue todo un referente. Siendo de las primeras en tener una imprenta, un descubrimiento que cambiaría para siempre la manera de editar y crear libros. A partir de ese momento, la cultura llegaría a todos de la mano de este elemento que se instalaría en Valencia por primera vez en España.
La primera imprenta española
La relevancia de Valencia como primera ciudad con una imprenta propia es total, si tenemos en cuenta el año en el que se instaló en este lugar de España. Debemos tener en cuenta que hace unos años todo iba un poco más despacio, es decir, las cosas se movían a un ritmo menor y eso quiere decir que muchos descubrimientos llevaban con cuentagotas.
La información circulaba a menor velocidad y quizás por ese motivo cada pequeño gesto era como mover una montaña. Solo aquellos que tenían la capacidad económica para poder salir de España, viajando o creando sus respectivas empresas, pudieron descubrir una serie de elementos que hoy en día son claves para el desarrollo de la sociedad.
Es el caso de algo tan simple como una imprenta. Hasta su invención el proceso de creación de un libro era muy lento. Se debían hacer las copias manuales con lo que suponía esa tarea que restringía la llegada de la cultura. Reduciendo solo a aquellos que podía pagar ese sueldo de una persona copiando literalmente el libro o si tuvieran los conocimientos necesarios y los recursos para poder copiarlo por sí mismos.
Era pues un bien de lujo que gracias a la invención de un hombre en el año 1440 cambiaría para siempre. Guttenberg fue el creador de la primera imprenta como tal, un descubrimiento que supondría el inicio de una nueva época en la que este tipo de elementos se convertirían en esenciales. Por lo que es este experto el que acabaría marcando a toda una generación desde Alemania.
Una zona muy alejada de nuestro país a la que se debería recurrir en caso de conocer cómo funcionaba este invento y cómo podría cambiar para siempre la literatura impresa. Aunque los libros a mano se siguieron creando, la imprenta sería una modernidad que atraería a millones de personas a una lectura que hasta la fecha les estaba prohibida. Gracias a un hombre que hizo historia, se pudo empezar a leer en español de forma masiva.
Valencia fue la ciudad española en la que se instaló la primera imprenta
Según dicen las crónicas del momento, en 1472 se instaló en Valencia la que está considerada como primera imprenta de España. Fue gracias a un comerciante, llamado Lamberto Palmart, que nos permitió obtener este gran privilegio y hacerlo de tal forma que nos acercaría la letra impresa en español a todas las casas.
El artilugio tardaría a dar sus frutos, no todas las obras podrían imprimirse en ella, además de que requería una preparación técnica para ver salir de aquellas planchas los primeros libros. No sería hasta dos años más tarde, es decir, en 1474 cuando se imprimía “Obres o trobes en lahors de la Verge Maria”, considerada como la primera obra literaria impresa en el país.
Si bien es cierto de que en esta imprenta previamente se pusieron a copiar otros textos, esta se considera la primera obra de arte literaria que salió de la imprenta de Lamberto Palmart. Un privilegio que tiene Valencia y de la que se puede sentir especialmente orgullosa después de haber estado años mirando al mar, al fin le habían traído esos viajeros constantes uno de los elementos que cambiaría para siempre la cultura.
Los contactos con otros comerciantes y ese primer éxito literario hicieron que proliferaran otras imprentas por el territorio, pero siempre bajo la tutela de los primeros expertos que surgieron en esta capital mediterránea. Hoy en día sigue siendo un referente de la literatura, no debemos olvidar los grandes nombres de la literatura que han surgido de esta ciudad, quizás seducidos por esos vientos de cultura y de progreso que nacían en esa edad media en la que se instalaba la primera imprenta.
El debut de la literatura impresa se produjo pues en la ciudad a orillas del Mediterráneo que fue capaz de apostar por un nuevo artilugio cuya relevancia hemos sabido con el paso del tiempo. La vida no sería la misma sin ese primer libro y los millones que se han publicado desde entonces.