Los datos recopilados por ‘Business Insider’ basados en un informe de la ‘NCD Risk Factor Collaboration’ revelan que los Países Bajos encabezan la lista, con una estatura promedio de 1,77 m. Le siguen Montenegro, Estonia, Dinamarca, Islandia y otros países europeos. España no figura entre los primeros en esta clasificación.
En el ámbito de las alturas excepcionales, Robert Pershing Wadlow ostenta el récord histórico del hombre más alto, alcanzando los 2.72 metros. Actualmente, Sultan Kösen, de Turquía, podría ser el hombre más alto vivo, con una altura de 2.51 metros.
La estatura de una persona se ve influenciada por factores genéticos, biológicos y ambientales. La nutrición y el estilo de vida de la madre durante el embarazo, así como la dieta, la salud y la actividad física durante el desarrollo, juegan un papel crucial. Países con alturas más elevadas, como los Países Bajos, a menudo presentan mejores condiciones socioeconómicas y calidad de vida. En este contexto, no sorprende que los Países Bajos tengan una esperanza de vida de alrededor de 82 años, superando el promedio de la OCDE de 81 años.
Los países del mundo con las personas más altas
Lideran la lista los Países Bajos, con una estatura promedio de 177.1 centímetros. En segundo lugar se encuentra Montenegro, con una altura media de 176.65 centímetros, seguido por Estonia en el tercer puesto, con ciudadanos que alcanzan los 175.75 centímetros en promedio.
La cuarta posición corresponde a Dinamarca, donde la estatura media alcanza los 175.7 centímetros. Islandia se sitúa en el quinto lugar con una altura promedio de 175.5 centímetros. Compartiendo la sexta posición se encuentran Bosnia y Herzegovina, junto con Letonia, ambos países con ciudadanos que miden 175 centímetros en promedio.
En la séptima posición se sitúa la República Checa, con una altura media de 174.6 centímetros, seguida por Serbia en el octavo lugar, con ciudadanos que alcanzan los 174.5 centímetros. Lituania se posiciona en el noveno lugar, con una estatura promedio de 174.15 centímetros.
En el décimo lugar se encuentra Eslovenia, con una altura media de 174.1 centímetros. Eslovaquia ocupa la undécima posición, con sus ciudadanos más altos alcanzando los 174.05 centímetros. Ucrania y Croacia comparten la duodécima posición, ya que ambos países registran una estatura media de 173.8 centímetros.
Suecia se encuentra en la decimotercera posición, con una altura promedio de 173.6 centímetros. Dominica ocupa el decimocuarto lugar, con una estatura media de 173.55 centímetros. Finlandia comparte el decimoquinto puesto con Noruega, registrando ambos países una altura promedio de 173.45 centímetros.
Países Bajos
Contrario a su estatura actual, un examen de los registros militares holandeses revela que a mediados del siglo XIX, los hombres en los Países Bajos eran de los más bajos en Europa, midiendo aproximadamente 165 cm. Esta diferencia se ha revertido drásticamente en los últimos siglos.
La disparidad entre los países con la estatura más alta y más baja, de 20 cm o más, se traduce en una brecha de crecimiento de aproximadamente ocho años para las niñas y seis años para los niños. Este fenómeno ilustra que las chicas guatemaltecas, las más bajas del mundo con una altura promedio de 150,9 cm, alcanzan la estatura media de las holandesas a los 11 años.
A pesar de la variabilidad global, el crecimiento humano ha sido evidente en los últimos dos siglos, con un aumento del 5% en la altura promedio. Aunque los factores genéticos, la nutrición mejorada y la democratización de la riqueza se consideran contribuyentes, los Países Bajos destacan como un caso único.
La genética y la selección natural parecen influir en el crecimiento acelerado de los holandeses, con un aumento de 20 cm en los últimos 200 años. Un estudio sugiere que las parejas más fértiles en los Países Bajos consisten en hombres altos y mujeres de estatura promedio, mientras que en los Estados Unidos, las parejas más fértiles son mujeres de baja estatura y hombres de estatura media.
Además de factores genéticos, el sistema de salud avanzado, los bajos niveles de desigualdad de ingresos y el sólido sistema de bienestar social en los Países Bajos contribuyen al crecimiento de la población. Además, el consumo intensivo de productos lácteos, ricos en calcio, ha sido identificado como otro impulsor del aumento de estatura.
Aunque el crecimiento continuo de la estatura podría estar llegando a un límite, los científicos consideran que entender la genética de la altura puede proporcionar información valiosa sobre otros rasgos complejos y trastornos multifactoriales. En un estudio reciente, se identificaron más de 3,000 variaciones genéticas relacionadas con la altura, ofreciendo oportunidades para avanzar en la comprensión de procesos biológicos vinculados al crecimiento esquelético y otros trastornos.
