jueves, 18 de enero de 2024

La curiosa razón por la que llevan pompón los gorros de lana

¿Alguna vez te has preguntado la razón por la que los gorros de lana que utilizamos durante el
invierno llevan pompón? Aunque parezca un simple detalle decorativo, lo cierto es que tiene una historia muy interesante que resulta de especial interés conocer.

Los gorros de lana son un complemento indispensable en el fondo de armario durante los meses de frío, al igual que las bufandas y los guantes. En la actualidad, podemos encontrar un amplio abanico de gorros diferentes, con diseños y colores para todos los gustos.

Sin embargo, es posible dividirlos en dos grandes grupos: con pompón y sin pompón. Al igual que ocurre con la gran mayoría de hechos históricos, existen diferentes hipótesis que explican por qué algunos gorros están coronados por una borla de lana.

Vikingos

Una de las hipótesis más aceptadas es que el pompón de lana tiene su origen en la era vikinga. Entre los siglos VIII y XI, Feyr, dios de la fertilidad y la lluvia, llevaba un pompón en su casco. Algunos historiadores creen que su función era simplemente estética para ocultar las costuras de la parte final del gorro. Mientras, otros consideran que gracias al pompón podía quitarse el gorro con mayor facilidad.

Inglaterra

En el siglo XVI en Inglaterra los soldados y marineros utilizaban la conocida como gorra Monmouth. Esta tenía una pequeña lengüeta en la costura que se podría considerar la precursora del pompón tal y como lo conocemos en la actualidad.

Francia

De lo que no cabe ninguna duda es de que el término pompón viene del francés, y se traduce como «esfera decorativa». Durante la época napoleónica, formaba parte del uniforme de la infantería. El pompón se colocaba en la parte superior del gorro de soldados y el color indicaba la compañía a la que pertenecían.

También se cuenta que los pompones de los gorros de lana con pompón nacieron en el siglo XIX en la marina francesa. Según esta teoría, en 1858, un soldado sufrió un accidente grave en un barco amarrado en el arsenal Brest durante la visita de la emperatriz Eugenia.

Lo que ocurrió fue que su cabeza se golpeó en el techo por el azote de una ola. Este tipo de accidentes eran frecuentes, así que para evitarlos se decidió incluir una bola roja en la parte superior de las gorras de los soldados para proteger su cabeza.

¿Cuál de estas teorías es la cierta? Nadie lo sabe, pero lo que está claro es que todas son muy interesantes.