Comienza la programación de la sala de exposiciones Pedro Torrecilla de Fundación Círculo (Plaza España, 3) este 2024 con un artista que desde muy temprano fue seducido por la acuarela. Con esta técnica descubrió que podía conseguir efectos diferentes que con otras técnicas no era posible, como que el dibujo tuviese más protagonismo recreándose en el detalle o conseguir unos colores más luminosos y sedosos, consiguiendo crear así una atmósfera más etérea y poética que le aporta una sutil plasticidad a lo representado.
A Jesús Lozano Saorin (Jumilla, Murcia; 1957) le gusta definirse como un pintor a la acuarela que desde niño siempre supo que quería desarrollar ese don que le hace ver la belleza en los lugares, rincones y objetos más insospechados. Es autodidacta, nunca recibió clases de dibujo o pintura, lo cual le confiere una gran autenticidad y singularidad al no estar influenciado o contaminado por lo académico. Esta libertad le ha permitido pintar lo que en cada momento le ha sugerido aquello que veía o le ha dictado su creatividad.
La pasión por el dibujo y la pintura le llevó a buscar, indagar y experimentar hasta conseguir ese camino que le identificase dentro del mundo de la pintura y lo encontró realizando un estilo propio, detallista, utilizando la acuarela como vehículo de expresión. Sus dotes en el manejo de este arte le convirtieron enseguida en uno de los mejores pintores de nuestro país en esta técnica de la acuarela, tal y como demuestra la exposición.
Desde su primera exposición en 1982 en su tierra natal, Jumilla, no ha parado de exponer por todo el país y también internacionalmente en países como Egipto, México, Italia o Brasil. En 1985, comienza su participación en exposiciones colectivas hasta un total de 50, de las que cabe destacar en 1993 en la Montserrat Gallery en Nueva York y en el 2000, en la I Exposición Diez Pintores Alicantinos en Ibero América. En 2009, participó con una de sus obras en la exposición 100X100 acuarela en la misma sala, pero esta es su primera exposición monográfica en la ciudad.
Está en posesión de un gran número de premios y galardones, de los que cabe mencionar varios primeros premios en diferentes certámenes nacionales de acuarela: en 1996, fue Medalla de Oro en el XL Salón Internacional de Artes Plásticas de Bèziers (Francia) y el Premio Goya Art Gallery en el II Salón de Verano Ciudad de Nueva York y en 2006, Premio Extraordinario Reina Sofía en el LXXIII Salón de Otoño, Madrid, entre muchos otros.
Saorin transmite una sensibilidad especial a través de los temas elegidos que encuentran en lo rural y su aprecio, la mayor inspiración. Objetos cotidianos, escenas reconocibles, rincones y elementos que denuncian la cruda realidad y que seguramente para cualquier persona, hubieran pasado desapercibidos y él les otorga un protagonismo, una singularidad, una belleza y una visión poética que permite percibirlo. Ha conseguido transformar lo sencillo, lo desechable, lo inservible, en obra de arte. No aparece la figura humana, pero indirectamente siempre está presente. Sus obras parecen representan el paso del ser humano por la vida a través de los objetos.