El Lunes de Pascua es el primer día de la Octava de Pascua o también llamada Semana de Pascua. En la liturgia católica, el tiempo de Pascua comienza este día y culmina con el Domingo de Pentecostés.
Sucede inmediatamente después del Domingo de Resurrección y abre un periodo de 50 días en los que se conmemora la muerte, resurrección y posterior reunión con los apóstoles de Jesús de Nazaret.
¿Por qué se celebra el Lunes de Pascua?
El Lunes de Pascua, al igual que la Semana Santa, no tiene una fecha fija en el calendario de días festivos. Los primeros cristianos, quienes también eran judíos, celebraban la pascua de Resurrección al mismo tiempo que la pascua Judía.
Con el Concilio de Nicea, en el año 325 d.C, tanto la pascua judía como la cristiana fueron modificadas en el calendario, en ambas celebraciones, permaneció el carácter móvil de la fecha. De esta manera, la pascua cristiana, ocurre tras la primera luna llena luego del equinoccio primaveral.
Actividades del Lunes Santo en España
En las comunidades autónomas de Cantabria, Cataluña, La Rioja, Navarra, País Vasco, y algunas localidades de Asturias y de la provincia de Badajoz, el Lunes de Pascua se considera un día festivo.
En Cataluña, una de las tradiciones más emblemáticas, para los días posteriores a la Semana Santa, es la realización de un dulce típico llamado la Mona de Pascua. El dulce, simboliza el fin del periodo de abstinencia hecho durante la cuaresma.
Su nombre es de procedencia árabe y significa “provisión de boca”, según la tradición, los padrinos deben regalar los dulces a sus ahijados el Domingo de Pascua, y este debe ser comido el día siguiente en una reunión familiar.
En localidades de Valencia y Murcia, a la Mona de Pascua, se le incorpora un huevo duro de color blanco o pintado de colores. Para la tradición, al dulce en forma de roscón, se le podían colocar tantos huevos como años tuviese el niño al que se le iba a regalar.
En Las Islas Baleares, para los días de Pascua, las familias y amigos suelen reunirse a realizar platos típicos de la región, como son, los Crespells y los Robiols, dulces de diferentes formas y tamaños, que aunque están presentes todo el año, son especiales durante los días santos.
En Mallorca, Igualmente se acostumbra a celebrar los Pancaritats en lugares como Mancor, Muro y Pollença. Los habitantes de los pueblos suelen hacer largas caminatas hacia las ermitas donde asisten a misas, y, al llegar, la costumbre es merendar arroces o Panadés el cual es un plato típico mallorquín.