En el pequeño comercio y la hostelería, el efectivo también sigue siendo el método de pago más comúnmente utilizado. La percepción general es que el uso del efectivo se mantendrá igual en el próximo año, especialmente entre las personas mayores de 64 años, donde solo un pequeño porcentaje cree que su uso disminuirá.
La mayoría de las personas obtienen efectivo de cajeros automáticos, aunque se percibe que estos están más alejados que en años anteriores, especialmente en áreas sin acceso a oficinas bancarias. A pesar de un ligero aumento en el conocimiento de los medios de acceso alternativos, su uso sigue siendo limitado.
Las tarjetas son el segundo método de pago más utilizado, y los dispositivos móviles y las plataformas de pago por internet están experimentando un aumento en su posesión y uso en comparación con años anteriores.
Aproximadamente el 65% de las personas utiliza efectivo a diario, mientras que el resto prefiere otros métodos de pago. Las principales dificultades reportadas están relacionadas con la calidad del servicio en las oficinas bancarias, como los horarios limitados y los tiempos de espera, así como la distancia a las oficinas en áreas rurales.
Edad
El dinero en efectivo es utilizado a diario en mayor medida por personas mayores de 55 años y aquellos con estudios básicos.
El uso diario del efectivo aumenta con la edad, alcanzando su punto máximo en el grupo de personas mayores de 65 años, donde el 77% lo utiliza regularmente. Por otro lado, las tarjetas son más populares entre las personas de 25 a 44 años, y su uso diario es más común en aquellos con estudios superiores.
En cuanto al uso diario de dispositivos móviles, es más frecuente entre los jóvenes y las personas con estudios superiores. En general, el 65% de la población utiliza efectivo a diario, mientras que el 32% prefiere tarjetas y solo el 10% utiliza dispositivos móviles con la misma frecuencia.
