martes, 4 de mayo de 2021

Portugal inaugura el puente colgante peatonal más largo del mundo

El nuevo puente colgante
Portugal quiere deslumbrar al mundo a golpe de récord arquitectónico. Para ello, acaba de inaugurar el 516 Arouca, el puente colgante más largo del mundo, de 516 metros de longitud y solo apto para peatones.

Tiene más cifras para impresionar, ya que se eleva a 175 metros sobre el río Paiva, perteneciente a la localidad lusa de Aroca (de ahí su nombre), a unos 60 kilómetros al sudeste de Oporto. Allí, propios y extraños podrán disfrutar de las bondades de un paisaje de naturaleza salvaje que se cuela a través de una plataforma de rejilla metálica abierta.

Su más de medio kilómetro de largo ha hecho que se convierta en el puente colgante peatonal más largo del mundo, desbancando así al Charles Kuonen Suspension Bridge del valle suizo de Zermatt, que ostenta 494 metros de largo y 85 de altura en su punto más alto. Hay más récords similares, como el del puente de cristal más largo (e impresionante) del planeta, abierto hace apenas unas semanas en China.

Las vistas desde el nuevo puente luso son su principal atractivo para quienes no sufran de vértigo. Se encuentra inmerso en el Geoparque de Arouca, incluido en la red de este tipo de monumentos naturales de la Unesco. Desde allí se pueden divisar las cascadas de Aguieiras, la garganta del río Paiva o las bonita playa de Areinho.

Además, esta zona del norte del país vecino es famosa por las rutas de senderismo que pueden realizarse. Como ejemplo, destacan las pasarelas de madera conocidas como Passadiços do Paiva, una de las joyas del lugar.

El 516 Arouca ha sufrido varias demoras en su construcción, ya que estaba previsto que se iniciaran las obras en 2016, pero tuvieron que retrasarse más de un año por la complicada orografía de la zona, que impedía llevar la maquinaria necesaria hasta allí. La empresa de ingeniería encargada de la obra, Itecons, tuvo que salvar unos desniveles de vértigo, además trabajar la malla rígida de las barandillas. Los cables, por su parte, son de acero.